Historias y canciones para niños

Si de niños, y del fomento al libro se trata, Juan Ramón Acuña y sus “Cuentos de un Vagabundo”, es una opción de divertimento aprendiendo. ¿Con qué se comen los libros? Con los ojos atina a decir alguien por ahí; es el juego del descubrimiento, ese que no se complica, pero suele hacerte pensar con integridad y deseos. Los niños no tienen por que ser parte de esta sociedad abrumada, y no tienen por que ser tratados como seres vacilantes: “Los ojos y el pensamiento del infante son concretos y sacan la verdad con la ternura y la verdad, que es pura en esencia, y solo se malgasta cuando se les arrecia a seguir las normas de sociedades desvirtuadas”.

Los cuentos de Juan Ramón, no son cuentos, son ideas y fomentan valores, hacen reír y hacen pensar, como si se tratase de un monstruo de mil cabezas que atiende las demandas de todos los que escuchan su voz, no solo hablada, sino también cantaba, porque para variar el talento se trasforma en canciones que los niños gozan con ímpetu.

Acuña, el cuentacuentos, es actor, cantante y compositor; que más se puede pedir cuando alguien está en un escenario, sino eso, y luego si él mismo es catártico y empático con su publico, todo se vuelve fácil, y los caminos de la inspiración se convierten en un arte que pocos pisan. Los niños dicen es el espectador más difícil,y Juan Ramón Acuña los hace cómplices de sus historias para regocijo de ambos, que son uno.

FERNANDO MUÑOZ